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sábado, 10 de febrero de 2018

RESTAURANTE 8 de 7: COMIDA CATALANA.

Es sábado 10 de febrero del 2018 un día para salir de la rutina y me voy de invitado al famoso restaurante 8 de 7 de Gerona, España, para saborear la comida catalana, un lugar con puntuación de excelencia.
Todo el que sale de su casa, de su tierra a otro país o continente una de las cosas que más extraña es la comida, y representa un problema para el sustento de alimentos y trata de buscar el lugar ideal para tener una comida que sea del agrado el consumo de la misma y que se asemeje un poco al del su lugar de origen.

Lo que todo público busca en un buen restaurante es que: tenga una excelente atención de los empleados, que los alimentos estén bien cocinados, tranquilidad, que este ubicado en lugar con seguridad y se llegue con facilidad, en estos momentos de crisis que los precios sean bajos, limpieza en sus inProbocadorstalaciones.
Para estar en el restaurante  8 de 7 tengo que ir de prisa porque hay que estar a la una de la tarde con treinta minutos y  para lograr un cupo hay que hacer con anticipación la reservación,  porque la clientela es mucha. 
Lo que nunca imaginé es sentarme a la mesa y que me sirvieran un plato parecido a los que se ven en los programas de televisión donde los concursantes preparan menús que son supervisados por famosos famosos cheps y así pasar a la siguiente ronda, hasta logra el ganador es estos espacios  tops shou. 
Mientras iba en camino porque tanta prisa, con tantos lugares en esta ciudad donde se puede comer y muy bien, llego a dicho lugar de comida catalana y de entrada un empleado se anticipa y manifiesta. "tienen reservación, de lo contrario lo siento tenemos llenos el cupo del restaurante, si reservaron pues sean bienvenidos", quien me invito le responde "si tenemos un reservación para cuatro personas"- "pasen delante, primero confirmare su reservación, si aquí esta su reservación, sigame para llevarles a la mesa asignada".
Resultado de imagen de imagenes del restaurante 8 de 7
Acostumbrado a comer en una forma desordenada y sin la orientación de un especialista en nutrición, hace que me exponga a padecer enfermedades propios de quien no lleva ningún control de lo que debe comer a determinada hora, que alimentos no de deben consumir a la hora de la cena, y otros consejos que se deben seguir para evitar que los trigliceridos y colesteroles estén en el nivel normal.
Me pregunta el empleado "que bebida eligió", le respondo "una copa de vino", aquí me equivoque porque en lugar de traer una copa de vino lo que me lleva es una botella de vino, pues había que beberse la botella de vino, claro conté con la colaboración de los invitados, de lo contrario me hubiese mareado la bebida.
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Mientras hacía fotos, me bebí varias copas de vino, decidía que pediría para comer, me decido por una paella, un bistec y de postre pido dos mandarinas. Otra sorpresa que me llevo es que la paella no es arroz color blanco o de otro color que le dan los condimentos, me sorprendió porque el arroz es color negro, pues llego el momento de saborear el primer plato.
Al instante que elegí el menú, me imaginé que como dos personas comeríamos paella, me recordó que en Honduras una paella es bastante grande, me siervirian un plato grande, pero todo es lo contrario, y que no un plato grande porque luego se sirve un segundo plato. 
El segundo plato es un bistec y espero ver una porción grande, y lo que sirven es una pequeña porción con un diseño similar a los vistos que hacen especialistas en los programas de cocina en televisión. El sabor de la Comida catalana en este  restaurante es fantástico.  
Mientras saboreo este suculento almuerzo catalán en el prestigioso restaurante 8 de 7 de la ciudad Girona, la gente sigue llegando a este lugar para almorzar y los mismos son rechazados porque que no hay cupo.
Gracias Dios por traerme a este lugar y si Dios lo permite regresaré porque es un restaurante cinco estrellas.


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