El domingo 28 de mayo del 2017 cuatro aficionados murieron
y muchos heridos, media hora antes de que iniciara el segundo partido de la final
del Torneo de Clausura de la Liga Nacional de Fútbol Honduras Motagua-Honduras
del Progreso, en su intento por ingresar a ser testigos de este evento futbolistico.
El problema se originó cuando los portones del estadio
“Tiburcio Carías Andino” se cerraron porque estaba lleno y esto provoco que los
aficionados reclamaran su acceso porque habían comprado los boletos o tiques.
Imágenes impactantes del canal de televisión Hable Como
Hable (HCH), que se transmitían en vivo conmovieron al público, donde se veían
niños llorando que la policía recupero
porque sus padres en la estampida los perdieron.
A esto se unía como personas en su intento de ingresar
al estadio cayeron al suelo y fueron golpeadas por los miles de aficionados que
corrían por ingresar y presenciar la final del Torneo de Clausura.

Los pocos policías encargados de la seguridad no
pudieron evitar la tragedia, porque algunos de ellos cargaban niños que rescataron
y los menores lloraban al no encontrar a sus padres de familia.
Los presentadores del canal Hable Como Hable, que trasmitían la antecela del partido, en el momento que se registraban los hechos de la tragedia, hacían llamados conmovedores a la policía y aficionados que calmaran los ánimos, cuando los niños extraviados lloraban ante la estampida.
Los presentadores del canal Hable Como Hable, que trasmitían la antecela del partido, en el momento que se registraban los hechos de la tragedia, hacían llamados conmovedores a la policía y aficionados que calmaran los ánimos, cuando los niños extraviados lloraban ante la estampida.
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